Ficus Danielle
Nombre Científico: Ficus benjamina «danielle».
Nombre Común: Higuera llorona.
Origen: India y Malasia.
Características: Pequeño árbol frondoso de hojas ovaladas y puntiagudas de color verde intenso y aspecto ceroso. Sus ramas son arqueadas y llegan a ser colgantes en ejemplares adultos debido a sus troncos delgados. Pueden llegar a alcanzar los tres metros de altura y con los años los troncos se acaban soldando aportándoles uno de sus aspectos más característicos.
Normalmente se comercializa enmacetado en forma de arbusto o mata pero puede llegar a encontrarse en forma de copa.
Cultivo: En nuestro clima el ficus danielle es considerado como planta de interior debido a su sensibilidad al frío. A este tipo de ficus les conviene un emplazamiento con luz intensa pero alejado de la exposición directa al sol y de las corrientes de aire. No tolera bien los cambios frecuentes de ubicación, a los que reaccionará perdiendo hojas. Es muy difícil que lleguen a florecer si son cultivados en maceta.
Es conveniente limpiar sus hojas con regularidad utilizando un trapo húmedo y abrillantador, o incluso admite darle una ducha ligera de cuando en cuando para efectuar la limpieza en profundidad de sus hojas.
A este tipo de ficus les gusta la humedad ambiental por lo que agradecen que pulvericemos regularmente sus hojas con agua, especialmente durante los meses fríos en los que encendemos la calefacción.
En cuanto al riego el ficus es una planta que preferirá dejar secar parcialmente el sustrato entre un riego y el siguiente para evitar pudriciones y hongos.
Para que nuestros ficus mantengan el vigor y su mejor aspecto debemos usar periódicamente un abono específico para plantas verdes, dejando de utilizarlo o espaciándolo más durante los meses de invierno.
En jardines de clima suave los ficus pueden ser utilizados como plantas de exterior plantándose directamente en el terreno, lo que hará que alcancen las proporciones de un pequeño árbol.
Usos: Uso ornamental como planta de interior.